Olga Brambilla de Falco acaba finalizar sus estudios secundarios cursados durante los últimos tres años en el Cenma "Dr. Francisco Ravetti" de Las Varas. Una historia de voluntad, fuerza y orgullo de un pueblo.
Olga: “Para mí estudiar no era un problema. Debo confesar que la materia que más trabajo me daba era inglés”
LAS VARAS.- La historia de Olga Brambilla de Falco es el claro ejemplo de que nunca es tarde para aprender. A sus 88 años acaba de concluir sus estudios secundarios cursados durante los últimos tres años en el Cenma "Dr. Francisco Ravetti" en Las Varas, localidad donde reside junto a su familia.
Dueña de un espíritu incansable y un ánimo envidiable, Olga se convirtió en el personaje del año en su pueblo, a partir de su amor por el saber, esa pasión que abrazó desde siempre pero que por circunstancias de la vida se concretó años más tarde.
Olga es viuda luego del matrimonio con Rogelio Falco con quien tuvo tres hijos, Zully, Norberto y Rubén que le dieron seis nietos y seis bisnietos.
Con gran amabilidad, Olga accedió a dialogar con LA VOZ DE SAN JUSTO para relatar su historia y sobre la misma comenzó señalando que "cuando yo era chica pude ir hasta cuarto grado en la escuela local y luego no pude seguir estudiando. Por eso me dediqué a otras actividades y cuando cumplí 19 años llegó la posibilidad de terminar la primaria y cursé quinto grado y luego hice sexto en las vacaciones. De esa manera con 20 años terminé la escuela primaria en la Escuela Bernardino Rivadavia de Las Varillas".
Más allá de haber concluido el primer objetivo de terminar la escuela primaria, tras contraer matrimonio, se trasladó a la zona rural y desde allí Olga despuntaba 'el vicio' de la educación dando clases a un grupo de niños. "Les daba clases a los chicos del campo, enseñándoles a leer y escribir. Tenía 12 chicos a quienes les enseñaba en un campo de Colonia San Bartolomé. Era una experiencia muy linda porque el grupo estaba compuesto por chicos que algo sabían y otros ni siquiera sabían leer ni escribir".
Con el paso del tiempo Olga y su familia retornaron a Las Varas donde actualmente reside. "Luego de unos años tuvimos la suerte que pusieron la escuela secundaria (el Cenma "Dr. Francisco Ravetti") y eso me hizo revivir el sueño que siempre tuve de seguir estudiando. De esa manera, cuando tenía 85 años mi hija Zully me incentivó a empezar el secundario.A mí me parecía imposible hacerlo, que no se me iba a cumplir el sueño pero después de tres años tuve la suerte de terminarlo".
Si bien cualquier persona puede pensar que un adulto debe sortear mayores dificultades que un adolescente a la hora de cursar sus estudios secundarios, la edad no fue un impedimento para que Olga cumpla su sueño."Para mí estudiar no era un problema. Debo confesar que la materia que más trabajo me daba era Inglés porque nunca había hablado ese idioma en mi vida. De todas formas también lo pude hacer".
El empeño puesto por Olga para perseguir su sueño se vio reflejado en los resultados académicos puesto que las materias del ciclo secundario fueron aprobadas con dos 6, tres 7 y las restantes con 8, 9 y 10. "Siempre tuve muy buenas notas. A mí me encantaba estudiar y lo hacía con muchas ganas", comentó con orgullo y satisfacción.
Tras recordar que "era la mayor" de la promoción, dijo además que "también tenía a mi cuñada Clide Vilosio, de 73 años, que también tomó la decisión de hacer el secundario cuando vio que yo había empezado y que me iba bien en los estudios".
Luego explicó que "estudiaba a cualquier hora" porque "tengo todo el tiempo libre y lo dedicaba a estudiar que me gusta mucho. Mi hija a veces me decía que deje de estudiar y haga otras cosas pero a mí me gustaba hacerlo".
"Es un sueño cumplido"
Durante la charla, Olga dijo en varias oportunidades que"terminar el secundario fue un sueño cumplido de toda mi vida, un regalo enorme que me dio Dios".
Cuando uno pensaría que aquí se terminó la historia, Olga sigue sorprendiendo al expresar que "me gustaría seguir estudiando pero acá (en Las Varas) no hay nada. Quizá si fuera a Las Varillas, pero para eso tendría que hacerme llevar y traer. Me gustaría estudiar música, siempre me gustó pero nunca pude hacerlo. No pierdo las esperanzas, quizá lo pueda hacer. Dios dirá".
Como mensaje final, se dirigió a los jóvenes que por distintas circunstancias abandonan sus estudios. "Yo les quiero pedir que sigan estudiando, el saber no ocupa lugar, al contrario, es una tranquilidad para el futuro. Lean mucho, que la lectura trae muchos beneficios, se activa nuestra memoria, emociones y el pensamiento positivo hacia nuestros semejantes. Es tan lindo estudiar que no quiero que nadie se pierda esta experiencia".
Emotivo acto de egresados
Al momento de recibir su diploma como egresada del Cenma "Dr. Francisco Ravetti" y por ser la mayor de las alumnas, Olga leyó unas conmovedoras palabras escritas de su puño y letra a través de las cuales reflejaba sus sentimientos y emociones.
Bajo el título "He cumplido mis sueños", el texto dice lo siguiente: "En el transcurso de mi vida he logrado cumplir varios de mis sueños que tenía desde muy joven.
Agradezco a todas esas personas tan abnegadas y cariñosas con quienes he compartido tres años inolvidables. Profesores, personal administrativo, personal de limpieza, compañeros de curso y a todos quienes de una manera u otra han estado a mi lado. También quiero agradecer a mis familiares que me llevaron todos los días al colegio, puesto de no ser así, a mis 84 años me hubiera resultado imposible. No me bastan las palabras de agradecimiento a una cantidad de personas que me han demostrado tanto afecto en los comentarios que han sido expresados en cada foto y video subidos a las redes sociales".
"También quiero felicitar a una compañera en particular, una luchadora incansable, mi cuñada Clide Vilosio quien también vio cumplido su sueño de recibirse. A mis compañeros les deseo muchas felicidades, sigan adelante".
"Por último quiero contarles que como premio al esfuerzo realizado el año pasado, me han elegido 'La Varense del año 2015' ¿qué más puedo pedir?. Es un sueño cumplido. Un beso enorme a todos, que Dios los bendiga, muchas felicidades".
Fuente: La Voz de San Justo